A través del Seminario Manejo Integrado del Medio Ambiente (MIMA), logré despabilar en el tema de la problemática ambiental que actualmente vive nuestro planeta y enfrenta la raza humana que es el calentamiento global que como consecuencias afectan de forma desigual a nuestros territorios perturbando la forma de vida, la salud, la cultura, la economía, los recursos naturales y sobre todo la existencia de nuestra actual civilización.
Comprendí que lo más importante no es sólo amilanar a la comunidad a la cual llegas a través de talleres de educación ambiental haciendo ver las consecuencias que ha traído la irracionalidad ante el manejo de los recursos naturales, sino fomentar la búsqueda a soluciones ante la problemática ambiental que vivimos.
Este seminario me dio la oportunidad de conocer alternativas endógenas a través de Biosistemas integrados, aplicados en los campos de mi perfil profesional como Ingeniera Agroecóloga, como son la agricultura, la silvicultura, acuacultura, y agroindustria, para la producción de alimentos y energías renovables, protección del ambiente, tratamiento de residuos sólidos, líquidos y gaseosos y recuperación de suelos, entre otros. Ésta es la posibilidad que ofrece la integración de los Biosistemas, una forma de energía limpia y a alternativa endógena de mayor potencial en la lucha contra el efecto invernadero.
Entre ellas tenemos tratamientos por medios aeróbicos, anaeróbicos y biológicos para producción de biogás, hongos comestibles, biocombustibles, así como también otras alternativas para producción de energía como la energía solar y la eólica pero también existe otras posibilidades que es nuestro deber seguir en su búsqueda.
Es muy difícil, pero no puede ser imposible, porque hay que cambiar la mentalidad de las personas, de las familias, de los pueblos, de las regiones, de los países, de los continentes y en fin de todo el planeta; cambiar nuestra manera de vivir, y eso no lo podemos lograr de un día para el otro, pero tenemos que empezar desde ya.
La Huella ecológica fue otra de las vivencias del módulo MIMA, donde conocí el área necesaria para absorber las emisiones de carbono generadas por el uso que hago de la energía en mis actividades diarias en el hogar, transporte, alimentos y alojamiento.
Comprendí que lo más importante no es sólo amilanar a la comunidad a la cual llegas a través de talleres de educación ambiental haciendo ver las consecuencias que ha traído la irracionalidad ante el manejo de los recursos naturales, sino fomentar la búsqueda a soluciones ante la problemática ambiental que vivimos.
Este seminario me dio la oportunidad de conocer alternativas endógenas a través de Biosistemas integrados, aplicados en los campos de mi perfil profesional como Ingeniera Agroecóloga, como son la agricultura, la silvicultura, acuacultura, y agroindustria, para la producción de alimentos y energías renovables, protección del ambiente, tratamiento de residuos sólidos, líquidos y gaseosos y recuperación de suelos, entre otros. Ésta es la posibilidad que ofrece la integración de los Biosistemas, una forma de energía limpia y a alternativa endógena de mayor potencial en la lucha contra el efecto invernadero.
Entre ellas tenemos tratamientos por medios aeróbicos, anaeróbicos y biológicos para producción de biogás, hongos comestibles, biocombustibles, así como también otras alternativas para producción de energía como la energía solar y la eólica pero también existe otras posibilidades que es nuestro deber seguir en su búsqueda.
Es muy difícil, pero no puede ser imposible, porque hay que cambiar la mentalidad de las personas, de las familias, de los pueblos, de las regiones, de los países, de los continentes y en fin de todo el planeta; cambiar nuestra manera de vivir, y eso no lo podemos lograr de un día para el otro, pero tenemos que empezar desde ya.
La Huella ecológica fue otra de las vivencias del módulo MIMA, donde conocí el área necesaria para absorber las emisiones de carbono generadas por el uso que hago de la energía en mis actividades diarias en el hogar, transporte, alimentos y alojamiento.
De igual manera la experiencia en el uso productivo de la biomasa, me dio la oportunidad de darles a conocer de mi trabajo, realizado en un Resguardo Indígena llamado “Aguas Negras”, ubicado en el Municipio de Milán, Caquetá a orillas del Río Orteguaza, donde se implementó un sistema de biodigestión de tipo flujo continuo, como generación de energía alternativa mitigando a reducir los problemas ambientales de la zona como contaminación de aguas y deterioro de los bosques por el uso de la leña. Esto me permitió darme cuenta, que sin pensar, con algunas acciones estoy poniendo mi grano de arena en la construcción de un mundo mejor y de esta manera garantizar un futuro sostenible a las generaciones venideras.
De la misma forma deseo continuar con mi tarea de sensibilizar a comunidades en la responsabilidad individual y colectiva para la creación de un modelo de desarrollo sostenible, en la cual el desarrollo del Módulo MIMA me aportó muchísimo para continuar con esta importante labor.